MEGUSTAESCRIBIR: ¿Cómo definirías Ángeles de sangre?
RAFAEL ESTRADA: Ángeles de sangre es el libro que siempre quise escribir: una mezcla de novela policial y terror, aderezada con un poquito de humor para quitarle acidez a la mezcla. Por otro lado, es también una novela de iniciación, porque el protagonista deja atrás el mundo académico para adentrarse en el mundo real; refleja las inseguridades que sienten los jóvenes cuando empiezan con su primer trabajo y el apoyo que reciben de la buenas personas que siempre hay a nuestro alrededor. Quise dejar claro que creo que no somos nada sin nuestros compañeros y amigos. Lo que me parece interesante de la novela negra es que te muestra la parte oscura de la sociedad y señala a la mala gente, para que podamos reconocerla; si a eso le sumamos que la técnica policial nos da los instrumentos para acabar con esos bichos que se hacen pasar por humanos, tenemos un género ideal para entretenernos y aprender a ir por la vida.
ME: El Dionisos es un club muy inquietante, que parece surgido de una película de David Lynch: ¿de dónde surgió la idea?
RE: Mi forma de escribir es muy visual, debido, supongo, a mi profesión de ilustrador y a la cantidad de películas que me meto para el cuerpo. David Lynch es uno de mis directores favoritos. El ambiente, más que la idea, pudo surgir inconscientemente del clima que este director imprime a sus películas, donde siempre parece que esté a punto de suceder algo, que hace que pasemos toda la película esperando lo peor, sea lo que sea eso. Creo que la escena del Dionisos tiene influencias de David Lynch en la economía del decorado y el contraste de los personajes, a pesar de que sólo aparecen tres: el músico, con su cara de sapo, sorbiendo con un pajita un café irlandés, la mano femenina que sirve las bebidas, con sus uñas afiladas y el inocente inspector totalmente expuesto. En cuanto al decorado, sólo podemos recordar la estatua de Hermes con Dionisos, y el oscuro rincón donde se agazapa el viejo sobre una mesa de mármol, el resto lo pone nuestra imaginación, y esa es, precisamente, la magia de la literatura.
ME: En la bibliografía de la novela figura el crimen de Alcácer: ¿hasta qué punto te has inspirado en hechos reales para escribir la novela?
RE: Hasta el punto de que fue, precisamente, la semilla de la que surgió la novela. No por el crimen en sí, que fue algo sin precedentes en la España de entonces, sino por el hecho de que mi hija tenía seis años por aquellos tiempos, y un asesino de niñas andaba suelto por ahí. Yo estaba acojonado, como la mayoría de los padres, supongo. Pero fueron las palabras del padre de una de las niñas las que me dieron la idea: dijo que a las niñas las habían llevado a una fiesta para matarlas allí, una fiesta dónde unos mueren para que otros se diviertan. ¿Puede haber algo más espantoso? Para escribir Ángeles de sangre he utilizado mucha documentación, que está recogida en un blog, donde he puesto material adicional: localizaciones, imágenes, los temas musicales que aparecen en la historia y los libros y películas que necesité para comprender el tema. He hablado con profesionales que me han asesorado y he visitado todos los lugares que aparecen en la novela, los he fotografiado y los he puesto a disposición de los lectores.
ME: Ángeles de sangre es una novela trepidante y a la vez con muchas referencias literarias: la Lolita de Nabokov, la Alicia de Lewis Carroll… ¿Cómo lograste ese equilibrio?
RE: Ese equilibrio lo da el tema, que consigue relacionarlo todo a través de la mirada de un grupo de gente interesada, que ven ángeles y nínfulas, utilizando todas las justificaciones artísticas y mitológicas que se les ocurren, para evitar caer en la cuenta de que se han convertido en monstruos. Además, las referencias literarias son importantes para crear el clima culto en el que se desenvuelven y dar verosimilitud a la historia: si esos libros existen, lo que sucede a su alrededor se convierte en real, aunque sea una realidad ficticia. También está la música, que envuelve a los personajes, crea una atmósfera y los define por lo que escuchan. Es una manera de dar información al lector evitando las descripciones coñazo.
ME: Parece que ya estás trabajando en la siguiente entrega de las aventuras del inspector Proaza: ¿puedes contarnos algo sobre el argumento de tu próxima novela?
RE: No solo puedo, sino que lo estoy deseando. Aún sigo documentándome, pero ya he empezado a escribirla. El tema es el tráfico de órganos y la carne de animales para el consumo humano. Habrá nuevos personajes, dentro y fuera de la comisaría: un flamante subinspector, que proviene de los Mossos d´Escuadra; hay ganaderos, toreros, matarifes, médicos y anarquistas…, y dos jóvenes activistas veganos, mujer y hombre, sin conexión entre ellos, que luchan a favor de los derechos de los animales, una, de forma legal, por medio de acciones divulgativas y, el otro, de manera clandestina, utilizando el sabotaje. He tenido que hacerme vegano, para poder entender lo que sienten los personajes. El título es Carne de primera y comienza justo donde termina Ángeles de sangre, con un asesinato que te dejará mal cuerpo durante toda la novela. Cuando esté terminada la trilogía, se podrá leer cada una de manera independiente o las tres de un tirón, como si fueran una sola novela.
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